Hay que ver lo que se prospera cuando gobierna el PSOE. Por todos es conocida la capacidad de gestión de la izquierda, los países donde gobiernan ven alcanzar las máximas cotas de progreso y prosperidad. Sí, reconozco que la ironía me encanta, pero en el fondo no lo es tanto, ya que sí que es cierto que cuando el PSOE gobierna, prospera el PSOE.

En la Comunitat Valenciana han abierto la sucursal andaluza, el modelo de la subida de impuestos, la apertura de chiringuitos para colocar a amiguetes, el ingente gasto en asesores… les mola. Por eso se han organizado para expoliar la provincia de Castellón, son una banda con poder suficiente para hacer lo que les viene en gana con el dinero de los valencianos, y los que lo sufren, como siempre, son los más vulnerables. El resto solo tienen que disfrutar de tener el apellido Puig o de tener el carnet adecuado.

Puig y Oltra han convertido la Comunitat en un barracón, tienen dinero para lo que quieren, la vara de medir cambia: a Oltra ya no le parece que haya que decir nada por el desamparo que sufrió una menor, abusada por su exmarido. Cuando la tutela de la niña estaba en manos de Oltra y su Consellería, la niña lo denunció, pero curiosamente nadie actuó, y nadie dará explicaciones.

En el 2018, de los 37 millones de euros presupuestados inicialmente en el Plan Edificant para Secundaria se recortaron 32, y de esos cinco millones que dejaron solo se pagaron 103.000 euros. En el 2019, a fecha 31 de julio, de los 224 millones de euros previstos para construir centros de Primaria solo se han pagado cuatro millones, el 1,86%. En Secundaria, de los 80 millones presupuestados solo se han pagado 432.000 euros, el 0,53%.

Y MIENTRAS todo esto sucede, la gestión brilla por su ausencia: en la Comunitat Valenciana más de 12.000 niños han empezado el curso en barracones en 400 aulas prefabricadas distribuidas en más de un centenar de centros. Los que venían a solucionarlo todo lo único que han conseguido ha sido retroceder en derechos y libertades como evidencia este curso escolar sin ir más lejos. Después de cinco años no solo no han eliminado los barracones, sino que hay más.

El plan de choque para eliminar las listas de espera de sanidad tendrá que esperar debido a la falta de liquidez económica para ponerlo en marcha. Esto implica que la lista de espera para una intervención quirúrgica se haya disparado con 66.659 personas, 8.761 más que cuando gobernaba el PP. Cada día desde que gobierna la izquierda en esta comunidad hay seis personas más en lista de espera. Seis personas más cada día.

No hay dinero para sanidad y educación, pero sí para pagar de forma indebida más de 600.000 euros al hermano de Ximo Puig. La familia es la familia, ya lo decían los socios del hermanísimo, «nos vamos a forrar». En fin, una banda.

*Diputada provincial del PP