Acabamos de pasar la primera fase de estas singulares fiestas navideñas. Estamos inmersos en un ciclo complicado, inseguro. La responsabilidad de cada una de nosotras y de cada uno de nosotros es primordial. Son unas fiestas diferentes, más contenidas y, sobre todo, tienen que ser más seguras. No tenemos otra opción. Y vuelvo a apelar a la responsabilidad ciudadana para cumplir las medidas sanitarias, para limitar nuestras reuniones a un máximo de seis personas, para no bajar la guardia en el uso de la mascarilla, para cumplir distancias y compartir, sobre todo, en espacios abiertos.
Castelló está atravesando la recta final de este año, un 2020 doloroso e incierto. Como alcaldesa de la ciudad comparto el pesar que estamos sufriendo desde el pasado mes de marzo. Comparto la incertidumbre del pequeño comercio, de las empresas medianas y grandes, de quienes ven peligrar sus puestos de trabajo. De quienes sienten que lo han perdido todo. De tantas y tantas personas vulnerables que han necesitado ayudas urgentes. Desde el Ayuntamiento, desde el primer momento, hemos priorizado el apoyo y las ayudas a una sociedad fuertemente sacudida por esta crisis sanitaria.
Esta crisis está siendo un desafío sin precedentes para la sociedad y, también, para las instituciones públicas. El gobierno municipal de Castelló decidió con firmeza estar al lado de la ciudadanía por lo que en estos meses estamos trabajando en las respuestas y en las soluciones urgentes. Estamos trabajando en la realidad. En este sentido, el Ayuntamiento ha creado líneas de ayuda económica y beneficios fiscales, planes para incentivar el empleo, para promocionar el comercio de proximidad.
Pero, si no protegemos la salud ni nos protegemos a nosotros mismos, a nuestras familias, a nuestros seres queridos, la realidad social, anímica y económica acabará engullendo toda esperanza. Debemos luchar conjuntamente contra esta maldita pandemia, codo a codo. Y más en estos días tan entrañables para todos nosotros, en los que la ciudad respira los colores del tiempo navideño. La ciudad está emergiendo de este prolongado letargo, luminosa, con prudencia y responsabilidad.
En estos momentos es imprescindible estar al lado, apoyando, a todo el personal sanitario, respetando y cuidando a quienes nos están cuidando. Estar al lado de esas vecinas y vecinos que cada día levantan una persiana en su comercio. Al lado de tantas y tantas mujeres que en esta crisis sanitaria han doblado los esfuerzos como cuidadoras de la gente mayor, de las familias. Y al lado de nuestras niñas y niños, que nos han demostrado, en todos los sentidos, una ejemplaridad y una tremenda capacidad de adaptación.
Castelló es una sociedad fuerte, superaremos este reto conjuntamente. Entre todas las vecinas y todos los vecinos. Tenemos que mirar a 2021 con esperanza, con fuerza y ánimos, pero sin dejar de sentir aquello que nos ha robado esta crisis sanitaria. Y, sin olvidar, tampoco, la amenaza del virus en ningún momento. Tenemos que actuar con responsabilidad para seguir disfrutando de lo esencial, de lo realmente importante. Quiero desearles toda la felicidad, los mejores deseos, y toda la esperanza para que, entre todos, Castelló no se detenga. H
*Alcaldesa de Castelló
