Los que dominan el idioma inglés saben que el rap es un estilo musical de origen afroamericano, basado en el recitado de la letra de una canción sobre un acompañamiento instrumental muy rítmico. Los libros dicen que el rap es una música vocal urbana de ritmo repetitivo y, naturalmente, bailable, propia de las comunidades negras que la pusieron de moda en Norteamérica en torno a los años 80 del siglo pasado.
El que fuera alcalde de Benicàssim, presidente de la Banda Municipal, delegado de Cajas Rurales y aspirante a presidente de la que podía haber sido gran obra deportiva y turística de Benicàssim en el mundo del golf y todo lo que hubiera ido apareciendo en su entorno, me refiero a José Luis Tárrega Bernal, que hoy está volcando sus fuerzas de la madurez en el cultivo de sus viñas, cada verano viene a verme, y me habla de la relación del moscatel de Benicàssim, convertido en deliciosa bebida desde las bodegas de los Padres Carmelitas del Desierto. Está orgulloso de la uva moscatel que probamos cada mes de agosto desde hace tantos años y me recuerda aquel tiempo en que él era también responsable de la Peña Ciclista Alomar local y yo ejercía como delegado en Castellón de la Federación Valenciana de Ciclismo. Bueno pues aquello nos unió para animar los actos de inauguración de la Gran Avenida Jaime I, desde aquel enclave que desde el Camí Nou o avenida del Doctor Comín, donde pusimos la tribuna y la meta para el final de las pruebas ciclistas que él mismo organizó. Con uva moscatel como premio.
De aquellos años de nuestra juventud explosiva, la de José Luis y la mía, no creo que tengan demasiadas noticias los infantes, chicas y chicos, que hoy juegan en la orilla de la playa y miran con curiosidad como construyo mis torres y castillos de arena. Por ejemplo, en nuestro vecindario del Arenal, hay más de una docena de críos que no pasan de los cuatro años.
Y hay una, mi vecina puerta con puerta, Teresa Cervera Vallés, que aquí nació hace tres años y que hoy muestra la enorme diferencia entre el cariño que entrega a sus hermanos mayores y la natural indiferencia con la que nos mira a todos los demás. Debe pensar que somos seres extraños, que comemos, dormitamos o leemos, escribimos a máquina en la terraza de al lado. Yo, en cambio, con seis nietos en mi carnet, la miro a ella con la incertidumbre de cómo se comportará a medida que pasen los años, si mantendrá su inteligencia y su belleza infantil o hará como yo, esperar que llegue hasta nosotros el humo de los barcos, mientras juega con nosotros lanzándonos pompas de jabón.
Pienso que, en su mayoría de edad, Teresa sabrá que cuando en el año 2005 el legendario rapero Kanye West sirvió unas copas de Saracco Moscato d’Asti durante una de sus fiestas, pocos podían prever que ese sería el origen de la fiebre por el licor de moscatel en Estados Unidos. Y es que, por ello, ahora está de moda ese licor como postre en la mesa de multitud de raperos, que después lo cantan y llaman exageradamente la atención con el rap del moscatel. H
