El PSOE debate los riesgos de una nueva cita con las urnas que volvería a ganar.

Pedro Sánchez asegura que, como ganador de las elecciones del pasado 28 de abril, es el último interesado en que se celebre una nueva cita con las urnas el próximo 10 de noviembre. Pero el presidente del Gobierno en funciones también está firmemente convencido --y todas las encuestas propias y ajenas le dan la razón-- de que el PSOE sería el partido que saldría más beneficiado de unas segundas elecciones, si no logra la investidura ahora, como pretende, o en septiembre.

En la ejecutiva de Ferraz coinciden en que ganarían estas nuevas elecciones «aún mejor» que en abril. Según los datos que manejan, de los 123 diputados que obtuvieron en las elecciones del 28-A, pasarían a contar con 140 escaños. Este es uno de los argumentos que se esgrimen en la Moncloa y en Ferraz tanto para presionar a Unidas Podemos --ya que piensan que la formación de Pablo Iglesias se desplomaría aún más en unas nuevas elecciones-- como para verse inmersos en una estrategia ganadora sea cual sea el resultado de la investidura de Sánchez.

Ahora bien, se empiezan a acumular poderosos argumentos para intentar evitar la repetición de las elecciones a toda costa. ¿Es necesario que se convoquen otra vez elecciones generales?. Según una reciente encuesta realizada por un organismo independiente, el resultado ha sido: sí, 25.93% (1.981), no, 74.07% (5.659). Total: 7.640 encuestados.

Así las cosas, los partidos en la oposición deben anteponer los intereses de España a los propios. Un Gobierno estable es necesario para salir del impasse, por el bien de la economía y del bienestar social.

*Secretaría Área de Políticas Sociales y LGTBI PSPV-PSOE Castellón