La sanidad es un derecho y como tal debe protegerse. Durante toda la legislatura anterior mi grupo parlamentario en Les Corts, Unides Podem, todos los grupos parlamentarios que conformamos esta cámara, hemos trabajado diversas iniciativas para mejorar nuestra sanidad y volver a situarla como referente tras los años de austeridad y de desmantelamiento de lo público que hizo el Partido Popular. No está siendo fácil reconstruir todo aquello que destrozaron pero poco a poco seguimos reparando y levantando aquello que tumbaron los anteriores gobiernos populares. Todas somos conscientes que hay mucho que mejorar, pero no por ello nuestra sanidad deja de ser una de las mejor consideradas en el mundo.
Hace una semana debatimos en el parlamento valenciano una proposición no de ley sobre las listas de espera que presentó Ciudadanos. Entre muchos puntos de su iniciativa básicamente trataba sobre las listas de espera. Para responder a ello, según el documento Estadística del gasto sanitario público, publicado por la Subdirección General de Cartera de Servicios del SNS y Fondos de Compensación de la Dirección General de Cartera Básica de Servicios del SNS y Farmacia, con datos del 2017, la Comunitat Valenciana no es la cuarta en gasto sanitario por habitante, como afirma la citada PNL, sino la número catorce de las diecisiete comunidades autónomas.
Las listas de espera son consecuencia directa de la infrafinanciación, un trato lesivo en relación al resto de comunidades autonómas. Es un objetivo común y ya bien trabajado por todos los valencianos y valencianas el poder revertir esta injusta situación, necesitaremos trabajar todos juntos para hacer realidad el nuevo modelo de financiación. Además del agravio histórico que hemos padecido en nuestra comunidad, no debemos de olvidar que aquí se impuso un modelo de privatizaciones ineficiente al servicio de los más ricos, en detrimento de la ciudadanía y del conjunto del sistema sanitario.
Cuando se privatiza se desmonta todo aquello que beneficia a la ciudadanía y a día de hoy seguimos sufriendo los efectos de esa política nefasta. Por esa razón, todavía tenemos la herencia de tiempos de espera largos en la sanidad pública, pero lograremos mejoras trabajando conjuntamente. Tenemos un horizonte y unos objetivos claros y en estos cuatro años vamos a conseguir alcanzarlos. Además las listas crecen porque la esperanza de vida se alarga, y más personas necesitan atención sanitaria. A esto añadiría que, actualmente se forman menos especialistas que nunca, y ello coincide con la jubilación forzosa de todos aquellos que empezaron su ejercicio profesional en los años setenta y ochenta.
POR OTRA PARTE, la mencionada propuesta también habla de falta de transparencia en las listas de espera. El gobierno del Botànic ha hecho una firme apuesta por la transparencia y publica todos los datos sin restricciones ni manipulaciones.
Para acabar, la Conselleria de Sanidad ha anunciado que presentará antes de fin de año un plan de actuación integral para la reducción de los tiempos de espera. Aquí estará esta diputada ejerciendo su labor fiscalizadora desde Les Corts.
*Diputada autonómica de Unides Podem en Les Corts
