Sin respuesta. La principal queja que trasladan al Partido Popular los vecinos de Castellón es que el gobierno municipal no les hace caso. El gobierno de Amparo Marco , el que nos cuesta a todos los contribuyentes más dinero de toda la historia, ni se molesta en ofrecer una contestación.

El tripartito da la espalda a las personas que venía a rescatar. También en plena pandemia del coronavirus y con una crisis económica desbocada se está gastando más de 500.000 euros en hacer más confortables sus despachos, unas paredes que no son transparentes como el cristal que prometieron. Y a base de ignorar las peticiones vecinales ha terminado ahogando su voz. Todo por el pueblo, pero sin el pueblo.

Castellón no tiene gobierno, sino una agrupación de intereses de tres partidos políticos --PSOE, Compromís y Podemo-- con 15 reinos, los de los 15 concejales que tienen que no se hablan entre sí.

Mientras, las quejas vecinales se multiplican. Los vecinos de la avenida de Lidón claman contra una reforma de 3,5 millones que no han pedido y les va a destrozar el barrio. Los de la plaza Constitución se movilizan ante los problemas de orden público que soportan y el cierre de su consultorio médico; los de la plaza Isabel La Católica están hartos de las juergas insoportables que se montan en plena vía pública, pese al covid, una entidad afín al equipo de gobierno municipal; a los de San Agustín y San Marcos se les ha vuelto a inundar el barrio por el desbordamiento del barranco del Sol; los comercios no han recibido ni un euro de ayuda... ¿Y qué hace la alcaldesa de nuestra ciudad? Comparecer para decirnos que… no va a haber Cabalgata de Reyes el próximo año. ¿En serio no hay nada más importante ahora mismo? La ciudad está sin rumbo. H

*Portavoz del PP en el Ayuntamiento de Castellón