A pocos días ya de la disolución de las actuales corporaciones municipales y la constitución de las futuras, me permito compartir una reflexión que, a lo largo de las cuatro legislaturas en las que he gobernado con el apoyo mayoritario de la ciudadanía, he llevado a cabo.

Sin ser estrictamente necesario para garantizar la gobernabilidad, siempre en mi voluntad ha estado la vocación de buscar consensos y sumar esfuerzos para conseguir los retos que se nos planteaban. Y voy a seguir con la misma práctica.

Son muchos los objetivos que nos marcamos para el nuevo mandato, cuatro años apasionantes que afronto con las responsabilidad de siempre, el compromiso renovado y la ilusión multiplicada por un equipo que contagia ilusión, vocación de servicio, humildad y capacidad.

Esta misma semana, hemos afrontado varias cuestiones que son trascendentales para el desarrollo de la temporada turística en nuestra localidad. No he dejado de trabajar ni un solo día, ni antes ni tras las elecciones municipales y antes de la toma de posesión del próximo sábado, ya he convocado esta misma semana a los grupos políticos de la futura corporación municipal para exponerles los cambios que la Generalitat Valenciana ha propuesto para la obra del vial de acceso a nuestra población.

Considero, y así lo practico, que garantizar la información a los grupos y tenderles la mano para --juntos-- conseguir los objetivos que nos marcamos como administración local es necesario. Confío en que la lealtad y responsabilidad de los concejales que vamos a integrar la nueva corporación esté a la altura de las circunstancias.

Lo he dicho a lo largo de todos estos años, lo he practicado y lo voy a seguir haciendo; frente a quienes hagan política contra mí, mi equipo y yo vamos a trabajar por Peñíscola, reivindicando lo justo, exigiendo lo necesario, sea quien sea que tengamos en frente. Es por ello que he propuesto en este mismo encuentro a todos los grupos con representación municipal en la futura corporación que unamos esfuerzos, redactemos un catálogo de necesidades que todos hemos identificado en nuestros programas electorales al respecto de cuestiones que dependen de otras administraciones, y juntos, las exijamos donde las tengamos que exigir. Que los plenos municipales sirvan para identificar carencias y proponer soluciones; para fiscalizar la acción de gobierno obviamente también.

Mi compromiso con Peñíscola es total, con el bienestar de mis vecinas y vecinos; con ser capaces de multiplicar sus oportunidades de futuro; con ser útiles para aquellos que requieren de mayor consideración por estar en situación de especial vulnerabilidad. Estoy seguro que, si compartimos todos esta misma vocación, será una legislatura positiva y fructífera para nuestra ciudad. En estos primeros días abordaremos cuestiones tan trascendentes como las dificultades para contratar agentes de policía en verano, la puesta en marcha de varias obras de reurbanización e iluminación en diversos espacios de nuestro municipio o la continuidad de las obras en infraestructuras deportivas, como el pabellón polideportivo, necesaria para poder seguir con nuestro sueño de contar con nuestro equipo de fútbol sala en primera división y jugando en nuestro pueblo.

Dejando los colores a un lado, espero que seamos todos del color Peñíscola y sepamos sudar la camiseta, siempre, por marcar goles por el bien común.

*Alcalde de Peñíscola