Ya hemos superado la barrera psicológica de los primeros 100 días de gobierno en Segorbe. Personalmente, la sensación es extraordinaria. En estos tres meses y medio hemos puesto todo nuestro esfuerzo y pasión en lograr hacer un buen trabajo.
A nivel político, por supuesto, también estoy orgullosa. No se pueden ni imaginar cómo han cambiado las cosas. La apertura del Ayuntamiento, que realizamos de forma inmediata a nuestra entrada, ha traído nuevos aires. Y sobre todo, se ha vuelto a poner en valor el diálogo y el saber y querer escuchar, que no oír. Ahora sí, ahora se están escuchando todas las voces, a todos los vecinos para intentar solucionar sus problemas o dar forma a sus propuestas.
Por supuesto, siempre aparecen voces críticas. Unas voces que antes callaban y no respondieron ni dieron soluciones cuando les tocó su turno. Ahora todo son prisas. Estamos solucionando o buscando soluciones lo más rápidamente posible. Pero todo lleva su tiempo. Hay que tener en cuenta que Roma no se construyó en un día y Segorbe no se va a reconstruir en tres meses.
Ya se han puesto en marcha proyectos como los del Museo Arqueológico, el Fuerte de la Estrella y crear una sala polivalente en un edificio del siglo XVIII, en materia de patrimonio. Ya se han solicitado reuniones tanto con la Diputación para comentar la situación actual de Segorbe y sus necesidades como con la Conselleria de Educación, la de Asuntos Sociales y la de Sanidad para buscar soluciones a temas tan importantes como el Plan Edificant y la adhesión del Conservatorio de Segorbe a la red de Conservatorios; la nueva residencia de la tercera edad y la situación de las mamografías preventivas de cáncer de mama.
*Alcaldesa de Segorbe
