Damos la bienvenida a la primera parada musical del verano. El FIB abre sus puertas con novedades importantes que marcarán un antes y un después en el rumbo de un festival que ha ido creciendo al mismo ritmo que lo ha hecho la provincia y nuestras infraestructuras. Unas infraestructuras que hoy se consolidan como principal billete a esta tierra de oportunidades.

Con el viento a favor, este año por primera vez los fibers han aterrizado en nuestro aeropuerto y lo han hecho en un vuelo directo y sin escalas, con una maleta llena de sueños e ilusiones y con unas oportunidades para la provincia que no hay que dejar escapar. Frente a gobiernos radicales que alejan inversiones y ponen en peligro la continuidad de estos eventos musicales, el Gobierno provincial se ha convertido en el principal valedor de este turismo de festivales. Yo, consciente de la calidad de estos eventos y de su potencial como motor dinamizador económico y de empleo, seguiré fiel a mi cita de cada verano, a la que no falto desde hace 21 años. No neguemos al mundo la oportunidad de descubrir cada rincón de nuestra provincia y sigamos apostando por lo que funciona, sin dejar que nadie ponga freno al desarrollo de esta provincia moderna y vanguardista, en la que mar y montaña se funden, y ofrecen al visitante dos caras de una misma moneda que es todavía un tesoro por descubrir para muchos turistas. Yo me quedo en Castellón, tierra de oportunidades. H

*Senadora PP por Castellón