La de vueltas que da la vida. La izquierda valenciana con bromas constantes sobre el aeropuerto de Castellón, aún hoy sigue diciendo aquello del aeropuerto sin aviones resulta que ha decidido que con el dinero de todos los valencianos vamos a comprar aviones para un empresa aeronáutica de nuestra Comunitat. Esto es tan cierto como que así lo ha decidido PSOE, Compromís y Podemos al apoyar el presupuesto de la Generalitat Valenciana para el 2018.

Resulta difícil de explicar, por parte de Puig y Oltra, como es posible que por un lado se les diga a los valencianos que no hay dinero para nada, que estamos mal financiados y por otro lado, que del dinero de todos los valencianos vamos a comprar, por valor de 3 millones de euros, aviones para una empresa. El argumento que se esgrime no puede ser más primario. Es para luchar contra la contaminación atmosférica. Y yo me pregunto, si por la misma regla de tres no hay que dar ayudas a transportistas, taxistas, etc. a que compren vehículos más sostenibles, pero no, estos últimos no correrán la misma suerte. Quizá entonces se podría esperar que por parte del Consell de Puig y Oltra se apoyase a las empresas cerámicas en su desarrollo y mejora de la tecnología, pero tampoco. Para las empresas cerámicas no hay nada nuevo bajo el sol, un abandono constante del Consell que carece de cualquier política industrial, y es incapaz de ejecutar un solo euro de inversión en dos años.

Por tanto esta es una de las grandezas que nos deja el nuevo presupuesto de la Generalitat en esa forma de calificar como renacimiento su forma de gestionar los intereses de la Comunitat. El primer año del renacimiento nos sorprendieron con la ganadería ecológica, a la que dos años después le han destinado 133 €, el segundo año fue el la Innovación y se creó la Agencia de Innovación de la que hoy solo se dedica a pagar la nómina de su director y amigo de Puig. Este tercer año es el año de la compra de aviones para hacer de la industria aeronáutica un nicho de empleo. Vaya chorrada es capaz de decir Puig para justificar una subvención de 3 millones para comprar aviones. Ahora resulta que una inmensa mayoría de valencianos van a encontrar empleo en el sector aeronáutico, según el president Puig. Sin embargo la realidad, la que viven las personas normales, nos dice que en el último año han desaparecido 6.100 autónomos en la Comunitat, y es que claro para ellos ni hay ayudas ni hay subvenciones.

Esta es la verdadera dimensión de la nueva política de Puig y Oltra. Listas de espera sanitarias de 123 días, ayudas a dependientes sin pagar, centros especiales de empleo sin cobrar, ayudas de empleo sin ejecutar… pero ahora los valencianos saben que su Consell va a comprar aviones por 3 millones de euros que es la nueva forma de hacer política de altos vuelos, a la altura de Puig y de Oltra.

*Diputado autonómico del PP