El Villarreal CF se ha ganado un respeto en toda España por su buen hacer durante las últimas temporadas. Y no solo en el ámbito estrictamente deportivo. Hoy día la marca Villarreal cotiza al alza y es conocida por la mayoría de los ciudadanos de nuestro país. Ello, que duda cabe, ha sido posible merced al empeño de Fernando Roig de revertir en el deporte y otros ámbitos de carácter social parte de lo que sus distintas empresas le reportan cada año.

Estos días Vila-real está de moda porque es sede del XXV Torneo Nacional de LaLiga Promises, que el jueves se inauguró nada menos que con la asistencia de 3.000 espectadores y del que fueron participes, entre otros, Raúl, Morientes, Pujol o Julen Guerrero. Los mejores equipos del país compiten en la Ciudad Deportiva Pamesa, mientras que el otro escenario del club, en Miralcamp, vio ayer como arrancaba el torneo de fútbol 7 Special Olympics en el que toman parte un total de 24 equipos, tres de ellos extranjeros. Y, por añadidura, dirigentes de los clubs de la Liga Profesional (Primera y Segunda A) celebraron en la ciudad su asamblea extraordinaria.

El Villarreal CF vuelve a ser un escaparate para la provincia y ejerce como perfecto embajador merced al trabajo bien hecho.