El pasado 8 de marzo se celebró en la Universitat Jaume I, el Día Internacional de la Mujer, cuyo lema era Visibilizar a las mujeres en la ciencia, las letras y el mundo laboral. Entendiendo por visibilizar al proceso de hacer visible lo invisible, de sacar a la luz, reconocer e incorporar las contribuciones de las mujeres en distintos ámbitos de la vida tanto pública como privada.

Para visibilizar las aportaciones que las mujeres han realizado a la ciencia, el profesor Enric Ramiro del Departament d’Educació de la UJI y miembro del grupo DIMPA (Didáctica de la Imagen y el Patrimonio) presentó la Baralla de Dones Científiques. La baraja, con 52 cartas de mujeres científicas a lo largo de 30 siglos de historia y en una variedad de disciplinas, como la física, la química, la astronomía, la medicina, la psicología, la economía o la sociología, teniendo en cuenta que en épocas anteriores, las fronteras entre unas disciplinas y otras no estaban tan marcadas. El objetivo es dar a conocer a mujeres, que sin recibir ningún premio por su trayectoria científica, ni constar en manuales, han contribuido a hacer «ciencia», en la gran mayoría de ocasiones sin ayuda, solo con tenacidad y amor por el conocimiento.

Con el vídeo Lletra de dona, Maribel Rocafull del Servei d’Informática de l’UJI, da voz a 10 mujeres escritoras, algunas que escriben y publican y otras que solo escriben por placer, para sí mismas, subrayando lo importante que es para ellas la escritura y el menor reconocimiento que han tenido las mujeres como escritoras a lo largo de la historia, llegando a tener que disfrazarse o utilizar seudónimos masculinos para poder publicar como fue el caso de Cecilia Böhl de Faber que escribía con el seudónimo de Fernán Caballero.

El menor reconocimiento de las mujeres en las ciencias y en las letras se constata en la diminuta proporción de mujeres premiadas en los premios Nobel. Entre 1901 y 2016, de 882 otorgados, solo 49 mujeres han sido galardonas con este premio, el 5,55% (www.nobelprize.org). El mayor número de mujeres premiadas ha sido en el ámbito de los premios Nobel de la Paz (16), seguido del premio Nobel de Literatura (14) y del premio Nobel de Fisiología y Medicina (12). A mucha distancia quedan los Nobel de Física, Química y Economía. Solo una mujer en los 115 años de historia de los Premios Nobel ha sido galardonada dos veces, Marie Curie, nacida María Sklodowska, recibió el premio Nobel de Físicas en 1903 y el de Química en 1911.

La visibilización de las mujeres en el mundo laboral se realizó mediante la organización de una mesa redonda coordinada por Jaime Clemente, estudiante de la UJI actualmente en prácticas en la Fundación Isonomía. En la mesa, cuatro mujeres de la provincia de Castellón contaron su trayectoria en el mundo laboral y cómo habían conciliado, o conciliaban, su vida laboral con su vida familiar: Raquel Pons, gerente de la empresa UCERSA; Gemma Font, periodista y CEO de Gmayúscula; Vicenta Conde, pedagoga y coordinadora del espacio familiar de la Caixa dels Colors y Mª Ángels Peixó, propietaria de la boutique Mª Ángels Moda.

La participación femenina en el mercado laboral entre 1976 y 2016 ha sido continua, reduciéndose la tasa entre la actividad masculina y la femenina de forma notable: si en 1976, era de 49,04 puntos porcentuales, en 2016, ha sido de 11,39 puntos. Ahora bien, estos datos globales no visibilizan las desigualdades existentes en el mercado laboral entre mujeres y hombres: mayor precariedad debido a unas mayores jornadas a tiempo parcial (el 24,3% de las mujeres ocupadas realizan jornada parcial frente al 7,8% de los hombres en 2016); menor proporción de mujeres en puestos de alta dirección y responsabilidad (solo el 11, 75% de los puestos de dirección en empresas del IBEX 35 son ocupados por mujeres en 2015); brecha salarial (se sitúa en 23,25%) y mayor discontinuidad en el desempeño laboral por temas de cuidado familiar (en 2015, el 93,33% de las excedencias por cuidado de hijos e hijas ha sido realizada por las madres).

La visibilización, e importancia, del cuidado en la sociedad y en el mantenimiento de la vida, se realizó con la presentación del libro Tendressa i equitat en els procesos de cura de Rosa García Ruiz. El texto, editado por el Servicio de Publicaciones de la UJI, es la tesis doctoral de la autora, que no pudo defender, desgraciadamente, por su fallecimiento repentino. Los resultados de su investigación empírica sobre los cuidados constatan que, aunque las personas entrevistadas consideran que mujeres y hombres tienen la misma capacidad para el cuidado, son las mujeres las que principalmente lo realizan. Información coincidente con los datos obtenidos por la Encuesta sobre Usos del tiempo (INE, 2010) en la que muestra que las mujeres, como media entre todas las personas encuestadas, dedican 4 horas y 7 minutos al día a tareas domésticas y de cuidado, mientras los hombres dedican 1 hora y 54 minutos. Diferencia de tiempo que se ha reducido desde 2003, fecha de la anterior encuesta, y que adjudicaba una dedicación masculina a las tareas de cuidado de 1 hora 30 minutos.

En resumen, visibilizar a las mujeres es mostrar su situación en diversos ámbitos sociales, algunos de ellos expuestos aquí, evidenciando las desigualdades existentes entre mujeres y hombres para así, poder actuar en pos de una mayor igualdad y consecuentemente una sociedad más justa.

*Directora de la Unitat d’Igualtat