La caridad no es, ni puede ser nunca, la solución. La caridad es solo la respuesta inmediata a una emergencia social. Nunca debería convertirse en un medio ordinario de subsistencia. Justo lo contrario de lo que promueve la izquierda en el Gobierno de España, que está institucionalizando el dolor y la desigualdad de quienes peor lo están pasando. Una falsa ayuda que perpetúa desigualdades.

Ningún español debe quedar atrás. Pero una cosa es ayudar a quienes no pueden sacar adelante a sus familias; y para todos ellos exijo el máximo respeto y el apoyo incondicional de las distintas administraciones públicas, desde las municipales al Gobierno central; y otra bien distinta es fomentar la cultura de la subvención. Un gobierno que no genera puestos de trabajo ni fomenta la cultura del esfuerzo está condenando el futuro y las oportunidades del país. Porque sí, al final, el sistema explotará. Por un lado o por otro, pero explotará.

Pedro y Pablo, en una acción encaminada a limpiar su maltrecha imagen por la nefasta gestión que están llevando a cabo de la pandemia del covid-19, han creado lo que ellos llaman la ‘renta mínima vital’ y que no es más que una compra de voluntades. O sea, de votos… Una medida que, según datos oficiales, costará al año unos 3.000 millones de euros, aunque las cifras, si uno empieza a sumar y a multiplicar, no concuerdan y todo indica que van a ser muchos más los millones que hay que desembolsar a base de subir impuestos. Porque nadie olvide que esa ingente cantidad de millones de euros no surge de la nada, sino de nuestros impuestos.

Desde el PP, defendemos que la mejor política social es el empleo. El trabajo dignifica y hace a las personas libres, además de comprometerlas con la sociedad. En estos casos hay que hacer uso de ese proverbio tan popular de «dale un pez y comerá un día, enséñale a pescar y comerá todos los días».

Pero para crear empleo hay que tener talento y una bien definida política económica, social y laboral. Y la izquierda, desde Felipe González a Pedro Sánchez, y sin olvidar al olvidable José Luis Rodríguez Zapatero; solo ha demostrado su capacidad para destruir puestos de trabajo, cerrar empresas y convertir en interminables las ‘colas del hambre’. Millones de parados, fábricas completas que recogen y se marchan, las colas del hambre… Y lo que nos queda por ver.

*Alcaldesa de Vall d’Alba y diputada provincial del PP