No se trata sólo de la pérdida de bosques, los incendios forestales, de los que cada año Castellón padece una trágica muestra, tienen consecuencias negativas «mucho más allá de lo que conoce normalmente la gente» y «sólo podremos cambiar la situación cuando la sociedad las comprenda de verdad», ha advertido en entrevista con Efe Serafín González Prieto.

Doctor en Ciencias Biológicas por la Universidad de Santiago de Compostela, experto del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) y presidente de la Sociedade Galega de Historia Natural (SGHN), se dedica a la recuperación de suelos quemados y «desgraciadamente» tiene «mucho trabajo».

González alerta de que «aunque algunas personas también se acuerdan de la fauna afectada, la mayoría cree que el fuego en el monte sólo afecta a la vegetación», que puede tardar en recuperarse un plazo de entre unos meses -si sólo había herbáceas- o varios cientos de años -en el caso de árboles de grandes dimensiones-. Sin embargo, el problema es mucho más grave por la erosión del suelo, pues «cada centímetro que se pierde tarda entre cien y doscientos años en recuperarse».

Esto incide en una disminución de la cantidad y la calidad del agua que puede llegar a almacenar y, finalmente, en la salud humana «debido a la contaminación atmosférica y de los recursos hídricos». Además, estos siniestros facilitan la invasión de especies exóticas, reducen la riqueza suministrada por el bosque en productividad forestal y otros recursos y afectan a otros aspectos como los daños al patrimonio cultural o el empobrecimiento paisajístico.

Para mejorar la eficacia en la lucha contra los incendios, en el CSIC llevan desde los años noventa diseñando estudios «sobre cómo es afectado el suelo y buscando maneras eficaces de mitigar los daños y acelerar la recuperación», ha indicado.

siniestros de gran escala // Esta información científica y técnica está disponible pero «lamentablemente no es aplicable a la escala de siniestros que hoy padecemos» y «si seguimos teniendo oleadas de 50.000 hectáreas de suelo quemado es muy difícil actuar». También ha subrayado los informes de la Fiscalía de Medio Ambiente, los cuales certifican que el 90 % de los incendios son intencionados y que la mayor parte de los pirómanos viven cerca de los siniestros.

Por ello, «es necesario sensibilizar al conjunto de la ciudadanía para, entre todos, presionar a quien tiene la capacidad para abordar la raíz del problema» que «en la mayoría de los casos es la actividad humana».

sensibilización social // González trabaja en esa sensibilización desde la presidencia de la SGHN, que «ha ayudado mucho a transmitir este mensaje a la sociedad, aunque con mucha frecuencia nos encontramos con un muro de incomprensión y de inacción cuando un tema concreto llega a los despachos de las administraciones públicas».

«Defendemos espacios de gran valor que, de otra manera, se perderían», además de publicar regularmente atlas de flora y fauna «con datos rigurosos» y diversos estudios como los censos de aves acuáticas que invernan que permiten analizar la evolución de esas poblaciones y de los ecosistemas de los que dependen, pone de manifiesto este experto que lucha para mantener los pulmones de tantas zonas de toda España.