La directora del Aeropuerto de Barcelona-El Prat, Sònia Corrochano, ha manifestado esta mañana que la infraestructura se "prepara" para reacciionar ante las consecuencias de las huelgas de pilotos y de controladores que pueden producirse este verano y para paliar sus efectos para los usuarios. Corrochano ha insistido en que trabajan para atender la "contingencia" pero añadió que, de momento, estos parones todavía no son una realidad. De hecho los controladores anunciaron la semana pasada que habían detectado una posibilidad de negociación con el cambio de Gobierno.

Corrochano ha hecho estas declaraciones durante la inauguración de la ruta de Ethiopian Airlines que connectará Barcelona y la capital de Etiopía, Addis Abeba. También ha afirmado que se ha notado favorablemente la desconvocatoria de la huelga de controladores a Marsella, a la que se han atribuido desde las compañías las culpas de las numerosas cancellaciones y retrasos de las últimas semanas. Las medidas que prepara el Aeropuerto consistirán en hacer más llevaderas las esperas a los viajeros afectados y para atender a las familias que viajan con niños o personas con necesidades especiales.

La iniciativa del aeropuerto intenta evitar el tercer verano consecutivo de dificultades. En esta ocasión, el problema puede estar en el aire, por las huelgas de pilotos y controladores y, como consecuencia, de nuevo en las terminales. En lo que llevamos de año, y según las últimas estadísticas disponibles, el aeropuerto de Barcelona-El Prat se situó en mayo como el peor en puntualidad entre las grandes instalaciones europeas, según Flighstats (solo el 56,1% de los vuelos partieron sin retrasos).