Un análisis de sangre que mida el nivel de microvesículas en plasma puede ayudar a predecir los infartos hasta tres años antes de que sucedan, según un estudio realizado por las investigadoras Lina Badimon y Teresa Padró en el Instituto Catalán de Ciencias Cardiovasculares (ICCC).

El estudio, que se presentó ayer en el Congreso de la Sociedad Europea de Cardiología, que congrega a 30.000 expertos en Barcelona, ha demostrado que el nuevo biomarcador se detecta mediante el análisis de plasma sanguíneo y predice la aparición de futuros eventos isquémicos, como infartos agudos del miocardio, en pacientes con hipercolesterolemia familiar con alto riesgo cardiovascular.

El trabajo demuestra que niveles elevados de microvesículas circulantes se asocian con un mayor riesgo de infarto independientemente de los niveles de colesterol del paciente. «Uno de los principales problemas que sigue habiendo en medicina, y en especial en el área cardiovascular, es que resulta muy difícil poder predecir cuándo un paciente va a tener un evento isquémico agudo, ya que los marcadores actuales son poco sensibles», explicó la doctora Padró.

Las microvesículas circulantes son como «pequeñas partículas» que derivan de las células y que se desplazan por la sangre y pueden provenir tanto de células activadas como de células que están entrando en proceso de necrosis o muerte celular. «Todas las células liberan estas microvesículas en cantidades bajas, pero sabemos que su número aumenta ante la presencia de situaciones patológicas, como los trastornos aterotrombóticos o la hipercolesterolemia familiar», detalló Padró.

Los investigadores analizaron las microvesículas circulantes de 143 pacientes con diagnóstico genético de hipercolesterolemia y por ello un alto riesgo cardiovascular, aunque sin manifestación clínica de enfermedad al iniciar el estudio.