La lacra de la violencia machista continúa de manera inexorable, pese a que haya fuerzas políticas que minimicen su importancia. En el 2019, 55 mujeres fueron asesinadas por sus parejas o exparejas, cuatro más que en el 2018. Es el tercer año seguido que aumenta el número de fallecidas, si bien los incrementos anteriores fueron de solo una víctima cada año.

Los motivos de este repunte son variados. No hay una causa-efecto, según los especialistas, pero que en el panorama institucional haya aflorado Vox dificulta, en su opinión, que las maltratadas pidan ayuda y refuerza a los agresores. «El negacionismo de la violencia machista incide en la base de la misma, que es el posicionamiento del hombre como guardián natural de la familia, con potencial para castigar a la mujer. Que se niegue la realidad hace que las mujeres se retraigan a la hora de denunciar, que el entorno y los profesionales que podrían detectar el maltrato miren para otro lado mientras que el maltratador se siente más impune», explica Miguel Lorente, experto y exdelegado del Gobierno en la materia.

REPROCHE // A su vez, Susana Gisbert, fiscala especializada en violencia de género y portavoz de la Fiscalía Provincial de Valencia, señala que el auge de Vox «ha disminuido el reproche social» hacia esta violencia, mientras que la situación de interinidad del Gobierno y la falta de una «apuesta clara quizá haya influido» en el aumento del maltrato con víctimas mortales. Las organizaciones de mujeres sí ven una causa-efecto entre el mensaje de la ultraderecha y el repunte de asesinatos y, en este contexto, en verano decretaron la «emergencia feminista». En una multitudinaria marcha, exigieron al Ejecutivo medidas decididas. Y es que el bloqueo político ha dificultado el desarrollo del pacto de Estado, con más de 200 acciones, que los partidos, antes de la llegada de Vox, acordaron en el 2017.

El pacto reclama adaptar la pionera ley integral contra la violencia de género, que en diciembre cumplió 15 años, a la normativa internacional para que contemple todos los ataques hacia las mujeres por el hecho de serlo y no solo los cometidos por sus parejas o exparejas. La plataforma feminicidio.net, que recoge asesinatos como el de Diana Quer y Laura Luengo, llevados a cabo por desconocidos para ellas, contabilizó 99 feminicidios en el 2019, uno más que en el 2018. Queda pendiente que la estadística oficial --que contabiliza 1.033 víctimas desde el 2003-- recoja todos los asesinatos y que los juzgados especializados atiendan todas las violencias. En el 2018 se aprobó la ley destinada a mejorar la formación en igualdad de los operadores jurídicos y que prevé reforzar la especialización de los juzgados, pero aún hay que realizar mejoras en ambos ámbitos, según Gisbert.

Lorente incluye entre los retos pendientes la mejora de la protección de las mujeres, en un contexto en el que la fiscala de sala delegada contra la violencia contra la mujer, Pilar Martín Nájera, subraya el «reducido» número de órdenes de protección dictadas. Asimismo, incide en la necesidad de reformar la dispensa que permite a las víctimas no declarar contra sus parejas, lo que motiva el archivo de muchos procedimientos.