Nuevo caso de violencia machista. Una mujer fue asesinada ayer por su pareja en su domicilio de Sant Joan Despí (Barcelona), lugar en el que encontraron a la víctima, Rosa (40 años). En España, la violencia de género ha enterrado en lo que va de 2020 a siete mujeres.

El novio de Rosa fue detenido a las tres de la madrugada en el aeropuerto de El Prat, cuando pretendía coger un vuelo para darse a la fuga. Los investigadores de los Mossos frustraron la huida gracias a la voz de alarma que dio el padre de Rosa. Inquieto porque no lograba contactar con su hija, acabó avisando a la policía para pedir ayuda. Los agentes que atendieron su llamada le propusieron acompañarlo al domicilio de Rosa y averiguar qué ocurría.

Según fuentes vecinales, el padre llevaba horas tratando de localizar a su hija y ni ella ni su novio respondían al teléfono. La peor de las explicaciones cogió forma al abrir la puerta: Rosa había sido asesinada y su novio había huido. El padre tuvo que recibir asistencia médica debido al duro golpe emocional que supuso encontrar sin vida a su hija.

Nueva relación / El presunto homicida es un hombre de nacionalidad española y de 45 años. Rosa era cinco años más joven que él y tenía una hija de 14 años fruto de un matrimonio anterior. Eva, la vecina que vive justo debajo de Rosa, a menudo oía gritos preocupantes de la planta superior.

Rosa, según Eva, se había divorciado y desde que hizo reformas en su domicilio, hace cuatro años, había comenzado a salir con otro hombre, el ahora arrestado por matarla. Con el inicio de esta segunda relación, las discusiones comenzaron.

En agosto, Eva llamó a la policía local de Sant Joan Despí --hecho que confirma el municipio-- porque esa noche los golpes contra los muebles y el llanto de la hija de Rosa la obligaron a actuar. Cuando los agentes acudieron los gritos habían dejado de oírse y, aunque llamaron al timbre, nadie abrió la puerta.

El juzgado de Instrucción en funciones de guardia de Sant Feliu de Llobregat se ha hecho cargo de la investigación y ha decretado el secreto de las actuaciones. Salvo el aviso de Eva a la policía local, no constan denuncias por violencia doméstica.