Un niño de ocho años fue hallado anoche muerto en un domicilio de la localidad alicantina de Elda donde la Policía, alertada por una vecina que escuchó gritos, encontró también atada y amordazada a la pareja del padre de acogida del niño.

Fuentes de la Policía Nacional han informado a EFE de este suceso, que adelantó anoche el diario Información de Alicante.

Sobre las 21.00 horas llegó el aviso de una vecina que, tras oír un fuerte grito, se acercó a la vivienda, que tenía la puerta entreabierta y no había sido forzada, y al entrar, se encontró a la mujer maniatada y con contusiones y al menor en el suelo.

Las mismas fuentes policiales han indicado que el niño todavía vivía cuando llegaron los servicios médicos, pero sus intentos por reanimarlo no tuvieron éxito y falleció, mientras que la mujer fue trasladada al hospital de Elda.

Según la Policía, hasta que no se realice la autopsia no se conocerán las circunstancias exactas de la muerte del menor, aunque sí se descarta que tuviera heridas por arma blanca.

Se busca a dos individuos que llevaban casco de moto como presuntos autores de la muerte y la agresión, según las declaraciones de la propia mujer.

En el momento de producirse los hechos el padre de acogida del menor y novio de la mujer se encontraba trabajando.