El pasado curso escolar 2.174 docentes de las escuelas públicas españolas (desde Infantil hasta Secundaria y Formación Profesional) pidieron ayuda al Defensor del Profesor para solucionar situaciones de conflicto en el aula provocadas tanto por el alumnado como por sus padres y madres. El acoso de los progenitores es uno de los principales problemas para los docentes y representa el 29% de los casos estudiados.

Mientras, las agresiones físicas por parte de los padres suponen solo el 3% de los casos. Las amenazas de los alumnos también han crecido (del 8% al 10%), de manera que los docentes se hartan de escuchar frases como «no vales para nada», «te voy a echar de la profesión» y «eres un inútil».

Son datos que preocupan al Defensor del Profesor, institución creada en el 2005 por el sindicato independiente ANPE, siendo Madrid la que más casos presenta.