Un anciano resultó herido ayer en Barcelona al ser atropellado por un autobús urbano, cuyo conductor prosiguió su ruta sin detenerse, pese a las advertencias y recriminaciones de los pasajeros. Según informaron fuentes de Transportes Metropolitanos de Barcelona (TMB), un autobús arrolló al peatón, que, al parecer, pretendía subirse al vehículo en una parada de la zona justo en el momento en el que el conductor se disponía a arrancar.
Una pasajera del bus explicó a Efe que las personas que viajaban en el vehículo notaron el impacto del atropello y pidieron al conductor que lo detuviera para aclarar lo sucedido y auxiliar a la víctima, pese a lo cual el chófer siguió adelante con la ruta.
El hombre, de 80 años, fue socorrido en la calle por varios vecinos que presenciaron los hechos para después ser trasladado en ambulancia a un hospital, en principio con una fractura en una pierna, aunque todavía se está pendiente de su evaluación.
De acuerdo con la versión de los pasajeros, el hombre se acercó corriendo al autobús y golpeó la puerta del vehículo para que el conductor le abriera, pero este arrancó, por causas que se desconocen, con lo que la víctima cayó al suelo y el autobús le habría pasado por encima. El conductor, según el testimonio de los viajantes, que le pidieron a gritos que no continuara la marcha, adujo que no había visto nada y que el accidente no era culpa suya.
