La Confederación Nacional de Autoescuelas (CNAE) advirtió ayer de que, «si continúa la huelga de examinadores, cerrarán centenares de autoescuelas», en una nueva jornada de huelga que contó con un seguimiento del 63% de profesionales, según la Dirección General de Tráfico (DGT).

Como cada lunes, martes y miércoles desde este verano, los examinadores estaban llamados ayer a otra jornada de huelga, que según la DGT fue secundada por el 63% del colectivo, de manera que se suspendieron 3.200 exámenes y se realizaron 2.130.

En un comunicado, CNAE calcula que desde que se inició el conflicto de los examinadores un total de 150.000 alumnos se han visto afectados, una cifra que ascenderá hasta los 220.000 si la huelga se mantiene en el mes de octubre con el mismo nivel de seguimiento que hasta ahora.

La Confederación considera «indispensable» que cese el conflicto «y no prosiga bajo ninguna circunstancia más allá de este mes». «Miles de autoescuelas han perdido el verano --continúa el comunicado--, y la sombría perspectiva de que en octubre sólo hubiera siete días libres de paros es inaceptable, pues de cumplirse dejaría al sector en una posición tan crítica que, con toda probabilidad, centenares de centros de formación vial se verían abocados al cierre».

El presidente de la CNAE, José Miguel Báez, subrayó que la facturación del sector ha disminuido un 40%, y muchos centros de formación vial están al límite de sus fuerzas. «Es la ruina para las 37.000 familias que viven de la formación vial en España, y otros sectores como los de los seguros y la automoción comienzan a resentirse», añade Báez.

La CNAE sugiere a la DGT que cumpla el compromiso al que llegó con los examinadores en el 2015 y «arbitre para ello la fórmula que considere más adecuada, al objeto de sortear las dificultades planteadas por Hacienda».

La Confederación insiste en reclamar unos servicios mínimos de al menos el 77% mientras duren los paros anunciados.