Tal como afirman las artífices del blog www.soycurvy.com, alimentado por Raquel y Lidia desde Barcelona y Madrid, respectivamente, «la sociedad está pidiendo a gritos normalidad, aceptación y evolución del ideal de belleza. Y el fenómeno curvy es un reflejo de ello. Ojalá llegue el día en que no sea noticia que una chica con curvas protagonice una campaña de moda, que sea tan normal como nos parece ahora el estereotipo de chica delgada, blanca y rubia», introducen las blogueras .

Pero la industria de la moda tiene sus propios criterios, prioridades, exigencias y tiempos. «Al final, también es una cuestión de practicidad. Lo más fácil y menos costoso es partir de una colección estándar, de una talla 38 o máximo 40, porque requiere menos ropa y porque siempre es más fácil pasar de un patrón pequeño a uno más grande que al revés», detalla Pilar Pasamontes, historiadora de la moda y directora científica del IED (Institut Europeu de Disseny) «Hay mucha gordita encantada de la vida y la moda curvy es una reivindicación de ellas mismas, que son una brecha de mercado intersante, pero cambiar toda la estética de una moda es difícil», considera Pasamontes. Para ella, «el fenómeno curvy es, sobre todo, un fenómeno de redes sociales. En Instagram hay fotos de mujeres curvies con uno o dos millones de seguidoras. Gente muy poco conocida se ha dado a conocer por romper con lo establecido en la industria de la moda. Les hacen un favor a mujeres como ellas y, como líderes de opinión también a las firmas de moda, pero los maniquíes que tenemos para trabajar, siguen siendo delgados», concluye Pasamontes.

«La tendencia ‘curvy’ pegó fuerte en el 2014 y el 2015, cuando algunas marcas empezaron con las tallas XXL, entre ellas Calvin Klein y Raph Lawren, y otras como Mango empezaron con lineas de ‘supersize’», repasa Montse Martorell, historiadora del arte y participante en seminarios especializados en moda, moda ética y márketing de moda. Todavía se calcula que al menos el 90% de las adolescentes no están contentas con su cuerpo», añade. H