Las autoridades chinas han desmontado una red fraudulenta que manejaba 50.000 millones de yuanes (7.600 millones de dólares o 7.000 millones de euros) y que captó a más de 900.000 inversores, informó este lunes la prensa del país. Al menos 21 personas fueron detenidas por su vinculación al portal Ezubao, una plataforma financiera que operaba por internet y captaba inversores en lo que se considera uno de los mayores casos de recaudación ilegal de fondos de la historia de China.

Las autoridades acusan a esta empresa de atraer a inversores con proyectos falsos por los que ofrecían retornos de entre un 9 y un 14 %, notablemente superiores a los de los bancos tradicionales pero en línea con los de otras empresas del creciente sector de las finanzas por internet. Ezubao, según precisó la agencia oficial Xinhua, desviaba los fondos que conseguía de sus inversores para financiar gastos personales de sus jefes y conseguía devolver las inversiones iniciales con el dinero que captaba de nuevos clientes.

Entre las adquisiciones del supuesto cabecilla de la trama, identificado como Ding Ning, figuran una casa en Singapur valorada en 130 millones de yuanes (casi 20 millones de dólares, 17 millones de euros) o un diamante de 12 millones de yuanes (1,8 millones de dólares, 1,7 millones de euros). La policía también encontró que Ding poseía alrededor de 84 millones de dólares en efectivo.

Este caso de fraude ha causado un gran revuelo en China por la popularidad de Ezubao, una empresa fundada en julio de 2014 y que se dio a conocer a través de una agresiva campaña de promoción, para la que incluso contrató publicidad en la cadena de televisión oficial CCTV.

Esta plataforma estaba en el punto de mira de las autoridades desde diciembre, aunque no se anunciaron las detenciones hasta este fin de semana por la dificultad de encontrar pruebas en contra de los sospechosos. La policía encontró los libros de cuentas de la empresa enterrados a seis metros de profundidad en un suburbio de la provincia de Anhui (este).