La carrera por tener una vacuna contra el covid-19 cuanto antes sigue lanzada. Y China parece ocupar posiciones destacadas para conseguirla y administrarla cuanto antes. Así se desprende de las declaraciones del presidente de la farmacéutica del país asiático Sinovac, Yin Weidong, que aseguró ayer que su vacuna contra el coronavirus, una de las más avanzadas del mundo, podrá comenzar a aplicarse masivamente a la población a principios del próximo año.

Una fecha que hace unos días no imaginaba ni la OMS, que preveía las primeras vacunaciones masivas para mediados del 2021. El ministro de Sanidad, Salvador Illa, hablaba del primer semestre según la información que se manejaba en el seno de la UE, explicó.

Durante una visita de diversos medios a los laboratorios y la factoría de la compañía en Pekín, Yin dijo que están estudiando la posibilidad de ampliar sus líneas de producción para poder doblar su capacidad, así como intentar fabricarla en otros países. También aseguró que tienen capacidad para fabricar cerca de 300 millones de dosis al año.

Ante la evolución de la pandemia en China y otros lugares, en marzo Sinovac comenzó a construir en tiempo récord un laboratorio-factoría dedicado especialmente a investigar y fabricar una vacuna para el covid-19, que ya está en pleno funcionamiento. H