El tribunal de la Audiencia de Burgos que juzgó el caso Arandina decidió ayer mantener en libertad provisional a los tres condenados a 38 años de prisión por agresión sexual cometida contra una menor de 15 años. En el auto, los magistrados obligan a los tres exjugadores del club de fútbol a pagar fianzas de 6.000 euros, que no tendrán que abonar porque ya las habían depositado.

La resolución sostiene que el fallo no es firme y «no destruye la presunción de inocencia», a la vez que subraya la estabilidad domiciliaria de los procesados, la disposición de medios para desarrollar su vida y la integración familiar y de convivencia, lo que lleva a no ver riesgo de fuga. Y recuerda que han cumplido con sus comparecencias periódicas en los juzgados en la situación de libertad provisional y acreditan arraigo.

Tras una vista de 20 minutos, los magistrados decidieron esperar antes de tomar una decisión sobre las peticiones de encarcelamiento formuladas por las tres acusaciones o el mantenimiento en libertad con condiciones que plantearon las defensas. De momento optaron por la provisional. Unas cien personas se concentraron a favor de los condenados, y una veintena a favor de la víctima. Patricia Ortiz, abogada de la familia de la chica, pidió respeto para el fallo y para la menor, que recordó que no tenía 16 años cuando sucedieron los hechos.