Cuatro niños, de entre 5 y 13 años, estuvieron al menos cinco días velando los cadáveres de su madre y del compañero de esta sin saber que estaban muertos. El terrible suceso, que se conoció el sábado, ocurrió en una vivienda en La Zarza-Perrunal, una pedanía minera de 1.200 habitantes perteneciente a la localidad de Calañas (Huelva).

Los pequeños convivieron con la pareja desconociendo su fallecimiento. Al parecer, la causa de la muerte fue la ingestión de fármacos. Uno de los niños avisó al propietario de la casa de que su madre, de 40 años, estaba «dormida y muy fría», por lo que no podía abrir la puerta. El casero acudió a la vivienda y pidió al niño que le abriese. En el dormitorio, de donde salía un fuerte olor, encontró a la pareja en la cama, ambos inertes.

El padre biológico de tres de los menores, expareja de la mujer fallecida, se ha hecho cargo de los cuatro niños. El padre tenía abierto un proceso para reclamar la custodia de sus tres hijos. La Junta de Andalucía está estudiando el caso para determinar qué es lo mejor para los menores.

La pareja podría haber fallecido el pasado martes. Los niños explicaron a la Guardia Civil que llevaban varios días comiendo y vistiéndose solos. Al parecer, los pequeños estaban acostumbrados a que su madre y su pareja no les atendiesen de forma continuada. Por eso no consideraron nada extraño que la pareja no saliera de su dormitorio, hasta el punto de que uno de los menores declaró a los agentes de la Guardia Civil que pensaba que su madre dormía y su pareja «jugaba a la Play».

La investigación del doble fallecimiento ha determinado que se podrían haber suicidado con la ingestión de medicamentos. Así lo indicaron fuentes de la Guardia Civil de Huelva según la información facilitada por la policía judicial. Las mismas fuentes han insistido en la hipótesis del suicidio ya que «no hay indicios de otras causas ni signos de violencia».

La familia apenas llevaba un mes viviendo en La Zarza de donde era la mujer. Los vecinos no habían observado señales para estar en alerta ni tampoco signos de desatención o abandono por parte de la pareja hacia los menores. El doble fallecimiento tampoco fue advertido por el vecindario.

La madre de los niños había acudido a los servicios sociales hace unos días para recibir ayuda con el fin de afrontar el pago del alquiler de la casa, una ayuda que se estaba tramitando.