El Boletín Oficial del Ministerio de Defensa publicó ayer la suspensión en funciones del guardia civil Antonio Manuel Guerrero, uno de los miembros de la Manada condenado a nueve años de prisión por abusos sexuales a una joven en los Sanfermines de 2016.
Según la resolución, Guerrero, «en situación de activo y encuadrado a efectos de régimen interior en la comandancia de Córdoba, pasa a la situación de suspensión de funciones desde el día 10 de diciembre del 2018».
El guardia civil estaba reincorporado al servicio pero sin asignación de destino y ahora se le ha aplicado el artículo 92 de la Ley de Régimen de Personal del instituto armado.
Por su parte, la víctima y las acusaciones populares que ejercen el Ayuntamiento de Pamplona y el Gobierno de Navarra han presentado recursos contra el auto que mantiene en libertad a los cinco miembros de la Manada.