Agentes de la Unidad contra las Redes de Inmigración y Falsedad Documental de la Policía Nacional han culminado este viernes el desmontaje de una red que planeaba lucrarse presentando falsos expedientes de regulación temporal de empleo (ERTEs) en 50 empresas ficticias de Murcia.

La trama, según ha informado la Policía, había creado esas empresas hace años, sin que tuvieran actividad alguna. Su plan era beneficiarse de ayudas fiscales y prestaciones sociales desplegadas por el Gobierno para paliar el efecto de la crisis que ha provocado la pandemia de coronavirus.

La operación policial sigue abierta. De momento han sido detenidas tres personas, socias de una gestoría de Murcia capital. Esa oficina, y el domicilio de uno de sus propietarios, eran la base de la red, que se había creado mucho antes de la epidemia.

OPORTUNIDAD DE NEGOCIO

En julio pasado, la Policía ya vigilaba las actividades de esta gestoría fraudulenta, que se dedicaba a crear falsas empresas con el único fin de tener razones sociales en las que contratar a inmigrantes a cambio de dinero, para que así esos falsos trabajadores obtuvieran un número de Seguridad Social y pudieran acceder a prestaciones.

La red simulaba también contratos de alquiler, con los que sus clientes pudieran acreditar arraigo ante las autoridades, principalmente el sistema de la Seguridad Social.

La epidemia y su crisis habían abierto una ventana de negocio para esta fábrica de contratos falsos. Ahora pretendían llevar a todos sus trabajadores falsos a ERTEs, intentando aprovechar la situación de enorme trabajo acumulado de las autoridades laborales.

La operación policial comenzó este lunes, con dos registros realizados en los que se ha intervenido abundante material informático y documental que acredita las actividades de la trama, además de 15.000 euros en efectivo, cuyo origen está en los pagos que hacía, en mano, la clientela.

El Juzgado de Instrucción 8 de Murcia se ha hecho cargo del caso. La investigación pasa ahora por la localización de los diferentes testaferros que sirvieron para crear las empresas, y también el interrogatorio a todos los que han resultado beneficiarios de la actividad ilegal de la red, cuyo número total se desconoce por el momento.