La Guardia Urbana de Barcelona (GUB) detuvo el lunes por la noche a un ciudadanof rancés que estaba en búsqueda y captura tras haber secuestrado a su hijo, de 2 años.

La captura se produjo cuando una patrulla de la policía municipal descubrió que un coche efectuaba maniobras imprudentes en la calle de Escócia (Nou Barris). Los agentes le dieron el alto y el conductor alegó que no podía darles la documentación porque estaba en el domicilio de su pareja, no lejos de allí. Los policías accedieron a seguirle hasta allí pero el hombre trató de despistarlo.

Se inició una persecución y el automóvil, con los agentes pisándole los talones, llegó a entrar en la Meridiana en sentido contrario.

Finalmente los policías atraparon el vehículo, en cuyo asiento trasero había un niño pequeño, de unos dos años. Al intentar identificar el coche, comprobaron que la placa de la matrícula era falsa. Y al certificar la identidad del conductor, se comprobó que era Loïc Piaudel, un ciudadano francés de 35 años, sobre el que pesaba una orden de búsqueda y captura por secuestrar a su hijo Mateo, de dos años, el 18 de noviembre en Nantes.

La Guardia Urbana, al registrar el vehículo, se incautó de un arma de fuego, machetes, cuatro matrículas falsas y pasaportes, al parecer también fraudulentos.

El entorno de Mateo había divulgado a través de las redes sociales una fotografía en la que aparecían padre e hijo para pedir la colaboración ciudadana. En el cartel se instaba a cualquier persona que los identificara que se pusiera en contacto con la policía francesa. Se detallaba que desapareció a bordo de un Ford Focus de color azul.

La policía municipal trasladó anoche a Piaudel a dependencias de los Mossos d'Esquadra. La Direcció General d'Atenció a la Infància i l'Adolescència (DGAIA) se ha hecho cargo del menor temporalmente hasta que llegue su madre.