Una patrulla de los Mossos d’Esquadra redujo y detuvo durante la pasada madrugada del sábado al domingo a un hombre que amenazaba a transeúntes en Santa Coloma de Gramenet blandiendo un machete de grandes dimensiones.

La llamada de algunos ciudadanos asustados alertó a la policía catalana de la presencia de un individuo que en actitud amenazante se dirigía a los vecinos empuñando un arma blanca. Según fuentes policiales, iba descalzo, desnudo de cintura para arriba y tenía manchas de sangre en el torso.

Cuando los policías lo localizaron, en el calle Rellotge, hizo falta que uno de los dos agentes desenfundara la pistola para convencerle de que soltara el machete. Pero ni eso fue suficiente para que se dejara detener y fue necesario que ambos policías entraran en el cuerpo a cuerpo con él, un forcejeo que duró varios minutos, para lograr esposarle. El hombre pasará a disposición judicial por un delito de amenazas.

Desde el Sindicat de Policíes de Catalunya (SPC), David Miquel ha insistido en que ejemplos como este demuestran la necesidad de que las pistolas eléctricas Taser sean una herramienta disponible realmente para los agentes que patrullan dada su idoneidad para reducir “fácilmente” -y sin necesidad de forcejear- a personas alteradas que suponen un riesgo para los ciudadanos, los propios policías e incluso para sí mismas.

"Para estos casos pedíamos esta herramienta y, una vez aprobado su uso, exigimos a la Conselleria d'Interior la máxima celeridad en la distribución a todos los destinos", ha explicado.