El seminario Mater Dei acogió ayer la celebración de la I Jornada Diocesana de Pastoral de la Salud, a la que asistieron voluntarios, sanitarios, visitadores de enfermos, sacerdotes, religiosas, así como miembros de varios movimientos y asociaciones como Hospitalidad Nuestra Señora de Lourdes o Vida Ascendente.

Tras la oración con la que comenzó la jornada, el sacerdote Francisco Román, director del secretariado diocesano de pastoral del enfermo y del mayor de la diócesis de Orihuela-Alicante, presentó su conferencia sobre la nueva organización y el funcionamiento del secretariado en dicha diócesis. «Al principio empezamos trabajando en encontrar la forma con la que poder realizar nuestra labor con las dos realidades con las que nos encontramos, ya que por un lado están los enfermos y por el otro los mayores, las dos muy grandes y muy importantes», aseguró. Dos realidades que no siempre van unidas. «El enfermo no tiene porque ser mayor, y el mayor no siempre tiene porque estar enfermo, y cada uno tiene sus propias características», apuntó al tiempo insistió en la necesidad de que las delegaciones o secretariados de la salud, del enfermo y del mayor, «deben cumplir una función de servicio» y es el delegado quien debe ir a las parroquias a preguntar e interesarse por la situación en la que se encuentran.

Román explicó que la diócesis de Orihuela-Alicante creó la figura de los coordinadores, y cada zona se encuentra atendida por dos laicos y un sacerdote.