Gregorio Serrano, director general de Tráfico, ha admitido que coordinó el operativo de la nevada desde su casa de Sevilla. Pese a culpar a los conductores haber hecho caso omiso de las previsiones y los avisos, ante el panorama que sabía iba a presentarse él no optó por quedarse en Madrid para encabezar la respuesta al temporal que dejó atrapadas a miles de personas hasta 20 horas en la AP-6. Tampoco lo hizo su ministro, el responsable de Interior, Juan Ignacio Zoido, que se encontraba también en la capital andaluza el sábado,donde acudió por la noche al partido entre el Sevilla y el Betis.

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Serrano ha reconocido su estancia en declaraciones a la cadena Ser en las que ha advertido que no ha “pensado dimitir” porque entiende que no hay “ninguna causa". El PSOE ha pedido ya su cabeza y se reserva la posibilidad de exigir la dimisión de Zoido o la del ministro de Fomento, Íñigo de la Serna,en función de las explicaciones que den.