El tuitero Jaime Bartolomé ha querido manifestar públicamente la necesidad de defender la Sanidad pública a través de un caso particular, el suyo, vivido en un sistema totalmente diferente como el estadounidense.

Lo hace tras ver muchos comentarios sobre la sanidad de Estados Unidos, y ante los que quiso mostrar la realidad de cómo se vive una enfermedad y su deseo de volver a España para tratarlo bien y sin gastos excesivos. En su caso, se trataba de la enfermedad de Crohn, una inflamación crónica del tracto intestinal.

Su seguro no cubría enfermedades preexistentes, algo que supuso un gran contratiempo. Tuvo que buscar un especialista de digestivo que le revisase durante 12 meses de estancia. Además, necesitaba receta de prednisona, que tomaba diariamente.

Así, encontró a una doctora que le hacía un 50% de descuento y le hacía una revisión cada dos meses que consistía en palparle el abdomen, un tacto rectal y un análisis de sangre. Estaba en 2000-2001 y pregunta: ¿Cuánto creerías que costaba?

Con esos precios, fue a una aseguradora a pedir presupuesto. Su perfil era varón de 25 años con enfermedad de Crohn con afectación de duodeno y colon controlada con corticoides y 5 ASA. El precio, 650 dólares al mes solo por cubrir la enfermedad.

Además, en el seguro había limitaciones en "letra pequeña de una hipoteca multidivisa", dice. Con un máximo de tres días de ingreso hospitalario al año y una colonoscopia.

Ese tratamiento tan simple en España, lleva un copago en Estados Unidos que varía en función de la aseguradora. Pero advierte, el drama no termina aquí: "Las aseguradoras retrasan deliberadamente la aprobación de estos tratamientos para pagar menos. Un retraso que supone meses de dolor e incapacidad".

Y se pregunta: "¿Sabéis lo que pasa a un enfermo de Crohn al que dejas en brote muchos meses con sus tejidos ahí, bien inflamados?"

En resumen, dice, cualquier enfermo en España tiene acceso a tratamientos de primer nivel. "Y su pronóstico y calidad de vida son mucho mejores que los de un paciente multimillonario en EEUU. No es solo pasta, es un sistema diseñado para evitar tratar al paciente".