El tema económico no es siempre el único en el que se fijan las familias al escoger el tipo de colegio que quieren para sus hijos, y en la decisión de optar por uno público, uno concertado o uno privado también pesa la diferencia en el proyecto educativo que ofrecen, destacan a Efe diversos expertos.

Principios ideológicos y religiosos, idiomas, instalaciones, clases de refuerzo, deportes, actividades extraescolares, comedor, autobús escolar, medidas de conciliación para los padres pueden ser las razones que inclinen la balanza de la educación de los hijos.

Para ello, visitar el centro -puede ser en los días de "puertas abiertas"- y recoger el máximo de información es uno de los consejos en el que coinciden los defensores de cada tipo de centro, aunque luego cada uno resalta las ventajas de uno u otro.

"La educación pública es la más igualitaria, equitativa y la que llega y equilibra todo el país", sostiene el responsable del área educativa de CSIF, Mario Gutiérrez.

Afirma que la calidad de la educación en los centros públicos es "la misma" que en los demás y sus docentes son "los únicos que han aprobado una oposición y han seguido un proceso de selección en igualdad de capacidad y méritos".

No obstante, reconoce que la distribución del alumnado a veces "no es equitativa" en cuanto a las personas con mayor dificultad de aprendizaje o aquellas de otras etnias, teniendo "más peso" en la red pública que en la privada, y ello "aparentemente" puede bajar los niveles educativos.

"Pero una de las obligaciones de la enseñanza pública es atender a todas las personas en edad escolar", recuerda.

Según datos del Ministerio de Educación, en el curso 2016-17 el 67,6 % de los centros de enseñanzas de régimen general eran públicos, el 25,9 % concertados y el 6,6 % privados.

Y las enseñanzas de régimen especial (Artes Plásticas y diseño, Música, Danza, Arte Dramático y otras) se ofertan mucho más en centros públicos (91,5 %) que privados (8,5 %).

Otros puntos de la estadística de Educación reflejan que el 81,1 % del alumnado extranjero en el curso 2015-16 estaba en escuelas públicas, el 13,6 % en concertadas y el 5,4 % en privadas.

Desde los colegios concertados, el presidente de la Confederación Católica de Padres de Alumnos (Concapa), Pedro Caballero, subraya que "no hay ninguna diferencia" entre los criterios de admisión de un centro público y uno concertado.

"Los alumnos entran en los mismos procesos, con los mismos puntos y baremos" en un colegio público que concertado a la hora de inscribirse, recalca.

La principal diferencia es el proyecto educativo, ya que los concertados intentan ofrecer uno "atractivo, innovador, de máxima calidad educativa", señala.

Caballero argumenta asimismo que los concertados responden a la "libertad de los padres de elegir la enseñanza de sus hijos, según sus convicciones o sus ideas".

Por ello, pide "respetar la escuela concertada" como las demás.

El presidente de la Concapa apunta en este sentido que el Estado costea el 100 % del gasto de los públicos, pero mucho menos de los concertados (para un puesto escolar en un centro público aporta aproximadamente 6.100 euros y para uno concertado unos 2.800 euros).

Desde los colegios privados, la responsable de Admisiones del Grupo de colegios Brains International School, Caridad Galindo, las familias buscan en este tipo de centros "una educación innovadora, que tenga en cuanta la individualidad de los alumnos, que aporte una mentalidad internacional, global, con oportunidades de desarrollar los talentos personales, que atienda la diversidad".

"Muchas familias realizan un esfuerzo económico grande para acceder a estos colegios", puntualiza.

Galindo dice que en los últimos años los padres "hacen un estudio bastante exhaustivo" de los colegios y buscan centros en los que, entre otras cosas, "los valores humanos formen parte del día a día, independientemente, de los principios religiosos".

"Según mi experiencia, los principios religiosos no son una prioridad a la hora de elegir colegio", asevera