Una masa de grasa solidificada de 130 toneladas bloquea el alcantarillado de la zona este de Londres, según informa la compañía privada de gestión del agua Thames Water. Un enorme 'fatberg', es decir, un 'iceberg de grasa', más pesado que 11 autobuses de doble piso o cuatro ballenas jorobadas y más largo que dos Camp Nou. Esta mole de desechos es la más grande vista en Londres hasta la fecha y deja rídiculas las 15 toneladas de un precedente similar en el 2013.

Thames Water ha calculado que tardarán hasta tres semanas en extraer y limpiar hasta el último resto del 'fatberg', que ha provocado cortes de agua y atascos por toda la capital británica. Hasta este miércoles, habían logrado deshacerse de 40 toneladas.

"Es como intentar romper una pared de hormigón", afirma el jefe de residuos Matt Rimmer en el comunicado de Thames Water. Además de lamentarse, ha asegurado crítico que "estas situaciones son totalmente evitables" con un correcto reciclaje y una gestión cívica responsable.

Thames Water presta servicio a 15 millones de personas en Londres e invierte cerca de un millón de libras esterlinas al mes (más de 1,2 millones de euros) en acciones de mantenimiento y limpieza.