El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, se ha puesto en contacto con las autoridades de Malta y Francia para explorar las posibilidades de que uno de estos dos países acojan a un nuevo barco cargado de inmigrantes que ha sido rechazado por Italia, según ha explicado la ministra portavoz del Gobierno, Isabel Celaá, en la rueda prensa posterior al Consejo de Ministros.

Malta sería el país más próximo al punto donde se encuentra la embarcación y España habría ofrecido a sus autoridades apoyo logístico para las operaciones de acogida humanitaria, según la ministra, que también ha recordado la disposición que mostró el Gobierno galo después que el español anunciara que acogería el ‘Aquarius’.

La embarcación, Lifeboat, pertenece a la oenegé alemana Lifeline y transporta 224 inmigrantes a bordo, rescatados cerca de las costas de Libia. Las autoridades italianas aceptan que desembarque, pero con la condición de que la guardia costera tome el mando, lo confisque y detenga a la tripulación. Tras la negativa de ésta, el ministro de Interior italiano, Mateo Salvini, ha pedido a Malta que permita ella el desembarque.