Un edificio de 24 plantas se derrumbó ayer en el centro de Sao Paulo, durante un incendio de grandes proporciones que también afectó a un inmueble vecino, según los bomberos. El edificio, una antigua sede de la Policía Federal, estaba ocupado por unas 50 familias. De momento, hay un muerto y al menos otras tres personas desparecidas, de acuerdo con las autoridades, aunque hay posibilidad de otras víctimas. R.D.