El Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo avala la controvertida política de devoluciones en caliente en la frontera de Ceuta y Melilla al considerar que son los propios migrantes quienes se colocan en una situación de ilegalidad al saltar la valla.

En una esperada sentencia emitida este jueves, la corte europea considera que España no violó el Convenio europeo de derechos humanos cuando expulsó a Marruecos a dos inmigrantes irregulares el 13 de agosto del 2014 (N.D, y N.T.) que luego presentaron una denuncia.

El fallo, adoptado por unanimidad de todos los miembros del tribunal, estima que los demandantes se pusieron ellos mismos en una situación de ilegalidad cuando de manera deliberada intentaron entrar en España franqueando el dispositivo de protección de la frontera con Meilla en lugares no autorizados, dentro de un grupo, aprovechando el efecto masivo y recurriendo a la fuerza

En consecuencia, decidieron no usar las vías legales existentes permitiendo el acceso regular al territorio español, agrega el fallo. Por lo tanto, Estrasburgo estima que la falta de una decisión individual de alejamiento se puede imputar al hecho de que los demandantes "no usaron los procedimientos de entrada oficial existentes y que la devolución en caliente se debe a su propio comportamiento".