“Hay una serie de enfermedades que sabemos que el día menos pensado van a llegar aquí debido al cambio climático y a la globalización. Tenemos que prevenir, estar preparados para hacerles frente, pero los recortes y la parálisis del Gobierno lo impiden. No hay dinero para investigar”. Más claro no lo puede decir Santiago Mas-Coma, presidente de la Federación Mundial de Medicina Tropical, que también es experto de la OMS y que como catedrático de Parasitología de la Universidad de Valencia conoce muy bien el auge que están experimentado las poblaciones de garrapatas, artrópodo que ha causado en España los dos primeros casos en Europa Occidental de la fiebre hemorrágica de Crimea-Congo. Se cree, aunque no hay certeza, de que se trata de alguna especie del género Hyalomma.

La presencia del virus que causa la Crimea-Congo en garrapatas se detectó por vez primera en España en el 2010 en una población de ciervos. ¿Qué se tenía que haber hecho? Lo que recomendaron los expertos: “Estudiar si se había extendido a otros animales o zonas, que es lo que ahora debería ser la máxima prioridad: ver qué implantación tiene y sobre todo si ha colonizado el ganado de la zona donde se ha producido la picadura”, señala el especialista.

La Junta de Castilla y León ha creado una comisión interdepartamental que probablemente encargue estos trabajos. “Es la historia de siempre. Como cuando hay una curva peligrosa en una carretera. Por más gente que diga que hay que arreglarla, no se hace hasta que hay cinco muertos”, lamenta Mas-Coma, que revela cómo ya lo advirtió en una reunión de coordinación que tuvo lugar el pasado mayo en el CSIC. “Tarde o temprano vamos a tenernos que meter con el tema de las garrapatas. Todo el mundo estuvo de acuerdo porque éramos científicos y sabemos lo que hay que hacer. Pero sabíamos que no se haría porque no hay dinero”, recuerda.

La cuestión es que cada vez va a haber más garrapatas de todos los tipos, incluida la Hyalomma, y un mayor peligro de transmisión de enfermedades. “Podemos ganar batallas personales, pero la guerra la tenemos perdida. No se va a erradicar jamás. Tenemos que aprender a convivir con ellas”, advierte Agustín Estrada Peña, catedrático del Departamento de Patología Animal de la Universidad de Zaragoza. H