Facebook ha aceptado finalmente poner filtros a la difusión de bulos como los que supuestamente han contribuido a elevar a Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos. El fundador y máximo responsable de la red social más utilizada del mundo, Mark Zuckerberg, ha pasado de quitar hierro a las denuncias a aceptar algunas de las sugerencias que le han hecho durante meses varios gurús de la comunicación como Jeff Jarvis o Tim O’Reilly, o incluso, el pasado viernes, el todavía presidente de EEUU Barack Obama.

La red social implantará mecanismos de verificación de las noticias y les cortará la opción de anunciarse para promocionar su contenido. «La cosa más importante que podemos hacer es mejorar nuestra capacidad de clasificar la desinformación. Esto significa mejores sistemas técnicos para detectar lo que la gente califica como falso antes incluso que ellos mismos», explicó Zuckerberg en el segundo artículo que publica sobre el tema en una semana. Facebook también advertirá a quienes compartan una información si otras personas la han denunciado como «falsa» y se compromete a «elevar el listón» para las historias que aparecen como contenido relacionado cuando un usuario publica una información, uno de los puntos más criticados ahora.