Ralph McQuarrie fue el ilustrador que diseñó el aspecto de R2-D2 y otros personajes icónicos de la saga 'Star wars', pero el hombre que llevó sus ideas al mundo real fue el experto en efectos espaciales Tony Dyson. El creador del legendario droide de la serie R2 falleció a los 68 años en Malta, donde vivía desde principios de los años 90, según informó este viernes el diario Times of Malta. Su cadáver fue encontrado en su casa de Triq Zirzieb, en la isla maltesa de Gozo, después de que la policía hubiera sido advertida por los amigos de Dyson de su ausencia desde hacía varios días.

“El amor por R2-D2 es universal; ningún otro personaje de 'Star wars' ha sido tan estimado a lo largo de los años como R2-D2”, explicaba el diseñador británico en su página web cuando se anunció que el carismático droide blanco y azul aparecería en la séptima entrega de la saga galáctica.

Dyson, conocido por su infeccioso modo de reír, diseñó y construyó también robots para las principales compañías electrónicas del mundo, incluyendo Sony, Philips y Toshiba. Además de su trabajo en 'Star wars', el técnico participó en los efectos especiales de películas como 'Superman 2', 'Moonraker' y 'El dragón del lago de fuego'.