Flamenca, azafata de Iberia, tenista, enfermera, moderna y skater. La «querida» Nancy, la muñeca rubia «para todas las niñas», ha adoptado muchas identidades desde que nació en 1968, y ahora, que cumple 50 años, una exposición en Madrid repasa su vida y su armario, a través de un centenar de ejemplares.

La muestra, en el Mercado del Juguete de Madrid, rinde homenaje todos los sábados del mes a la muñeca española moderna por antonomasia, lanzada por la compañía valenciana Juguetes Famosa. «Ha sido una muñeca muy querida en España», explica Rafael Sánchez Barros, el coleccionista que ha puesto a disposición de este Mercado 100 muñecas de su vasto conjunto, compuesto por unas 600 piezas.

Sánchez Barros explica que Nancy nació cuando Tino Juan, que trabajaba para la también histórica Mariquita Pérez, quiso sacar una «muñeca de plástico que fuera rubia y que pudieran adquirir todas las niñas», algo que no pudo conseguir en la compañía de muñecas de Portugal, por lo que propuso su proyecto a Famosa.

En 1957, en Alicante, un gran número de pequeñas empresas jugueteras, decidieron unir sus fuerzas obligados por el cambio tecnológico que había traído la aparición del plástico y la dificultad de abordar las inversiones para mantener la competitividad.

Así nació Famosa, que, una década después, lanzó la muñeca de la que se han vendido en el mundo más de 25 millones de unidades y cuyo secreto no ha sido otro que ser «como una niña normal, con una estética y medidas acordes con la realidad», que se ha ido adaptando a las tendencias y a la demanda, explica Sánchez.

«A la primera le hizo una carita muy dulce, redontita. Luego fue cambiando el molde de la muñeca pero seguía siendo preciosa», apostilla el coleccionista.