La directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, ha pronosticado que el impacto del coronavirus en la economía generará una recesión «tan mala o peor» que la que tuvo lugar como consecuencia de la crisis del 2008.

«El pronóstico de crecimiento global para 2020 es negativo, con una recesión tan mala o incluso peor que la de la crisis financiera global. Pero esperamos una recuperación en 2021», explicó ayer Georgieva al término de su participación en la videoconferencia de los ministros de Finanzas y banqueros centrales de los países del G20. «Es primordial priorizar la contención y fortalecer los sistemas sanitarios en todas partes. El impacto económico es, y será, severo, pero cuanto antes pare el virus, más rápida y más fuerte será la recuperación», agregó.

En este sentido, la búlgara explicó que el FMI apoya «firmemente» las medidas fiscales que han tomado varios países en distintas partes del mundo para «fortalecer» los sistemas de salud y «proteger» a las empresas y trabajadores afectados. Asimismo, Georgieva también valoró de forma positiva las decisiones tomadas por los bancos centrales de relajar la política monetaria.

No obstante, el FMI alertó de que, aunque los países desarrollados están en una «mejor posición» para responder a la crisis, los mercados emergentes y países pobres afrontan «desafíos significativos». Según los cálculos del Fondo, los inversores internacionales han retirado 83.000 millones de dólares (77.140 millones de euros) en los últimos días de los mercados emergentes, lo que supone la «mayor salida de capitales hasta la fecha».

El organismo con sede en Washington también especificó que 80 países han solicitado ayuda al FMI. «Estamos trabajando de cerca con otras instituciones financieras internacionales para proporcionar una respuesta coordinada», subrayó.

Por otro lado, el presidente del Banco Mundial, David Malpass, afirmó que los países «necesitan moverse rápido para incrementar su gasto sanitario, fortalecer sus redes de seguridad social, apoyar al sector privado y revertir la interrupción de los mercados financieros».