Ya tenemos la primera fotografía de un leopardo negro (o pantera negra) en estado salvaje en África en un siglo. Un equipo de científicos, liderado por Nicholas W. Pilfold del Institute for Conservation Research (San Diego Zoo, California) y Ambrose Letoluai del Loisaba Conservancy (Nanyuki, Kenya), ha confirmado el hallazgo del ejemplar en un nuevo artículo en el 'African Journal of Ecology'. El fotógrafo inglés Will Burrard-Lucas también ha logrado captar unas instantáneas del animal durante una expedición en Kenia.

Los leopardos negros deben su color a un fenómeno conocido como melanismo, en el que un exceso de pigmentación se traduce en un ‘ennegrecimiento’ de la piel, aunque las manchas propias de los leopardos siguen siendo visibles en condiciones de luz adecuadas. Los investigadores estiman que, en el caso concreto de estos felinos, el melanismo se debe a una mutación del gen 'Agouti Signaling Protein'. Si bien es cierto que no está claro el porqué de esta variación del color, los expertos argumentan que podría tratarse de una adaptación ambiental relacionada con los entornos de selvas tropicales húmedas, algo que explicaría la mayor frecuencia de este rasgo en las poblaciones asiáticas de leopardo (de hecho, también los jaguares americanos tienen una variante negra).

Nick Pilfold, científico del Zoológico de San Diego, recuerda que "el melanismo ocurre en aproximadamente el 11% de los leopardos en todo el mundo, pero la mayoría de estos leopardos viven en el sudeste de Asia”, dijo. Los ejemplares melánicos del leopardo, como el fotografiado hace tan solo unos meses, son mucho más frecuentes en el sureste asiático, pero una verdadera rareza en el continente africano.

100 años desaparecido

La última evidencia directa de un leopardo de estas características se remonta al año 1909, hace exactamente 100 años, cuando un ejemplar fue avistado en Addis Abeba (Etiopía). La espectacular imagen del animal se ha conservado desde entonces en el ‘National Museum of Natural History’ de Estados Unidos. En el 2013, un fotógrafo de un diario de Nairobi captó también la imagen de una pantera negra en Kenya, pero el equipo de San Diego ha insistido en que se trataba de un ejemplar criado en cautividad reintroducido desde un parque de EEUU.

No es la primera vez que se avista un leopardo negro en Kenia. Pero sí la primera vez que el avistamiento viene acompañado de evidencias que lo corroboren. "Aquí proporcionamos pruebas fotográficas de la existencia de un leopardo negro en Laikipia County, Kenia", anuncian en el recién publicado artículo los investigadores Nicholas W. Pilfold, Kirstie Rupper, Jenny A. Glikman, Jenna Stacy-Daws, David O'Connor y Megan Owner del Institute for Conservation Research (San Diego Zoo, California) y Ambrose Letoluai del Loisaba Conservancy (Nanyuki, Kenya).

Los primeros avistamientos de este ejemplar tuvieron lugar entre septiembre del 2017 y enero del 2018, mientras los responsables del estudio captaban imágenes con fototrampas para evaluar la población de leopardos en la zona.

Una especie vulnerable

Los leopardos (todos ellos Panthera pardus, independientemente de su pigmentación) están clasificados en la 'lista roja' de la International Union for Conservation of Nature (IUCN) como una especie vulnerable. Es decir, que se encuentra a un paso del estar oficialmente en peligro de extinción. Actualmente no se conoce el estado demográfico exacto de estos animales, pero todo apunta a que la población está disminuyendo.

La IUCN apunta como algunas de las principales amenazas de la especie problemas como la pérdida y fragmentación del hábitat, las represalias causadas por conflictos y la caza. Todos ellos factores que, además, están compartidos con la disminución de otras poblaciones salvajes como es el caso de la de los leones.