Si este invierno el termómetro baja mucho, al otro lado de los Pirineos se avecinan tormentas en el sector eléctrico. El mal estado del parque nuclear francés ha obligado al operador Electricité de France (EDF) a detener el funcionamiento de 13 de los 58 reactores que generan el 75% de la electricidad en las 19 centrales repartidas por el país.

Para compensar esta falta de suministro, se adoptarán medidas excepcionales, pero si las temperaturas son muy bajas no se excluyen cortes de electricidad, especialmente en los meses de diciembre y enero. Este es el sombrío escenario que ha dibujado este martes laRed de Transportes de Electricidad (RTE), filial del operador (EDF), que gestiona 100.000 kilómetros de líneas de alta tensión.

La empresa pública suele detener en verano el funcionamiento de las unidades generadoras de energía para realizar las labores de revisión y mantenimiento necesarias para disponer de su máxima potencia en invierno. Sin embargo, la Autoridad de la Seguridad Nuclear(ASN) desbarató los planes de EDF al impedir la reapertura de cinco reactores en los que detectó una fuerte concentración de carbono.

Además, el pasado mayo se encontraron deficiencias en la fabricación de componentes de reactores en una fábrica del constructor Areva y anomalías en un reactor de la central de Flamanville.

UN HECHO INSÓLITO

En definitiva, la ASN desaconseja volver a poner en marcha casi un tercio de las unidades, un hecho insólito desde que se levantó el parque nuclear francés entre las décadas de los setenta y noventa del siglo pasado. Según RTE, la previsión es mantener cerrados 13 reactores en diciembre y al menos nueve durante todo el invierno. La consecuencia es que la producción eléctrica disponible será la más baja de los últimos diez años.

Para hacer frente a los picos de consumo, EDF suele recurrir a las viejas centrales de gas o de carbón, pero también aquí el margen de maniobra es más limitado que en años anteriores, porque muchas unidades están cerradas o selladas. Por lo que respecta a las eólicas y a los paneles solares que se han ido extendiendo en los últimos tiempos en el país, su capacidad de producción es de 1.900 megavatios más que el pasado invierno, lo que equivale a la energía generada por dos reactores nucleares.

RTE calcula que estas dos fuentes podrán suplir un 30% de la energía en función de las horas y meteorología. Aún así, la producción eléctrica de EDF será de 11.300 megavatios menos que en diciembre del 2015, una reducción del 11,5%.

BAJADAS DE TENSIÓN DEL 5%

De ahí que RTE se prepare para adoptar medidas excepcionales si el invierno es duro. Entre ellas, cortes puntuales en el suministro obajadas de tensión del 5% en toda la red para ahorrar unos 4.000 megavatios, el equivalente de todo lo que se consume en la región parisina.

En último extremo se harían rotaciones programadas para cortar la corriente en determinadas zonas si hubiera un gran desequilibrio entre oferta y demanda. El plan de emergencia de RTE prevé que no haya cortes de luz de más de dos horas y garantizar siempre el flujo eléctrico en hospitales, industrias de alto riesgo y otros centros de actividad prioritarios.

Para evitar los escenarios más pesimistas, Francia echará mano de todos los instrumentos a su alcance, entre ellas una importación masiva. EDF ha dado los primeros pasos para comprar más energía aprovechando la nueva interconexión eléctrica subterránea con España inaugurada en febrero del 2015, que incrementa la capacidad hasta en 2.000 megavatios.

El operador francés se verá obligado a obtener de sus vecinos hasta 12.200 megavatios, pero, si el mercurio baja mucho, RTE adoptará medidas más drásticas para reducir el consumo de 21 polos industriales. Pase lo que pase, los franceses saben que la factura de la luz será más cara. En agosto del 2017 aumentará un 2%, según anuncio el pasado octubre la Comisión de Regulación Energética (CRE).

CONSEJOS A LOS CIUDADANOS

El responsable de RTE, François Brotte, ha aconsejado a los usuarios evitar encender los electrodomésticos en horas punta, apagar los aparatos electrónicos por la noche y bajar la calefacción al salir de casa.

Recomendaciones que figuran en un dispositivo de alerta ciudadana que se lanzará el próximo 5 de diciembre a través de una aplicación móvil para evitar tensiones en la red. Francia prevé reducir al 50% el porcentaje de energía nuclear en la producción eléctrica en el año 2025.