El ministro francés de Agricultura, Stéphane Travert, reconoció que es «probable» que sigan a la venta en Francia huevos contaminados con fipronil cuyos lotes, importados de Holanda o Bélgica, no han sido todavía identificados.

En una entrevista publicada este martes por el diario Le Parisien, Travert insistió, en cualquier caso, en que «el riesgo sanitario es muy débil» teniendo en cuenta la concentración de ese insecticida y los «hábitos alimentarios franceses».

Justificó la tardanza con la que se está conociendo la amplitud del problema porque «la situación evoluciona permanentemente: recibimos informaciones lote por lote, punto de entrada por punto de entrada, por decirlo de alguna forma, a cuentagotas».

El lunes su departamento informó de que ha identificado seis nuevos centros de transformación (14 hasta ahora) y 40 establecimientos mayoristas que han importado en Francia 45,4 toneladas de derivados de huevos contaminados con fipronil. A Euskadi también han llegado.

El ministro hizo notar que hay que prestar atención a que «algunos productos llegan a Francia, son transformados y se van a otros países». También se comprometió a publicar «en los próximos días, conforme se conozcan los resultados de análisis» los nombres «del conjunto de los productos contaminados y la fecha de puesta en el mercado».