Unos desconocidos entraron el pasado lunes por la noche en el zoo de Thoiry, situado a unos 50 kilómetros de París, y mataron a un rinoceronte para llevarse uno de sus colmillos. El director del centro, Thierry Duguet, ha denunciado esta acción y ha calificado a los intrusos de “furtivos”.

El grupo entró en esa reserva de fauna africana de maneraclandestina y logró colarse hasta la jaula donde se encontraban los rinocerontes. Allí dispararon a un ejemplar macho, de 5 años, y acto seguido le serraron el colmillo. Los responsables del zoo han destacado que, para llegar hasta os rinocerontes, los furtivos tuvieron que sañtar una valla de 3,5 metros de altura y forzar varias puertas con candados.

EL MERCADO NEGRO DEL MARFIL

El personal del zoo descubrió el cuerpo a la mañana siguiente y alertó a las autoridades. Según ha declarado Duguet al diario “Le Parisien”, es la primera vez que unos ladrones atacan a un animal en un zoo de Europa, aunque en África es una práctica relativamente habitual.

Una experta consultada por France Info explicó que, por un colmillo de rinoceronte, se puede pagar en el mercado negro una cantidad de entre 30.000 y 40.000 euros, y que sus destinos principales son países del sureste asiático, donde se les atribuyen propiedades afrodisíacas.

La ministra francesa de Ecología, Ségolène Royal, reaccionó a este macabro suceso pidiendo una prohibición del comercio de marfil -que ya está proscrito en Francia- en todo el mundo.