Parte de los trabajadores de la industria y de la construcción volverán esta semana a su puesto de trabajo después de sus vacaciones forzosas. Una vuelta a la actividad paulatina y marcada por las restricciones en materia de seguridad: geles de manos, evitar el contacto, regular las entradas y salidas, no formar corrillos en los descansos o no compartir herramientas son algunas de las medidas pactadas por sindicatos y patronales.

Uno de los trabajadores que vuelven hoy a su puesto es José Manuel Gómez de la Uz, empleado de la fábrica de producción de aluminio que AluIbérica tiene en Avilés. La compañía inició el viernes su actividad aunque a esta planta solo acudirá un tercio de sus 280 trabajadores. El resto o están teletrabajando o están parados porque la empresa tiene parada la electrólisis desde hace un año.

En su caso, además de medidas generales como la gestión de las entradas y salidas o la prevención de los trabajadores de no acudir a sus puestos si tienen síntomas, familiares enfermos o patologías previas, se han añadido otras específicas (la siderurgia no tiene una guía sectorial) como partir a la mitad los turnos en las actividades de fundición y mantenimiento para que «coincida la menor cantidad de gente posible», así como medidas de limpieza en comedores, vestuarios, zonas comunes y geles de manos en cada esquina.

«Los responsables de Prevención de las empresas han preparado una batería de medidas, adicionales a las ordinarias, que ya están en marcha y que se irán adaptando a los cambios», explica el director general de la patronal siderúrgica Unesid, Andrés Barceló. La siderurgia representa a una parte de la industria parada, pero la mayoría (química, sanitaria, agroalimentaria, energética, etc.) ha seguido en activo, considerada como «esencial». También las obras se reactivan, a excepción de reformas y rehabilitaciones que se mantendrán paradas. «Reiniciaremos la actividad con orden, adaptando los planes de seguridad a la guía», cuenta el presidente de la patronal CNC, Juan Lazcano. La construcción es uno de los sectores más organizados para esta vuelta al trabajo, según el secretario general de UGT Fica, Pedro Hojas. Además de las normas comunes, se pide evitar «compartir» herramientas, reducir las visitas a obra y evitar los «corrillos» del descanso. «Si es posible, las empresas pondrán un termómetro a disposición de los trabajadores», dice la guía.