A los hijos les transmitimos nuestros genes, pero mucho más. En el entorno familiar, los jóvenes reciben de los padres informaciones y maneras de actuar que tienen una gran importancia en sus vidas, y el entorno cultural acaba de definir el carácter de los individuos. Discernir entre las influencias de la genética y de la cultura sobre la forma en que somos cada uno de nosotros ha sido una vieja discusión. Un artículo reciente analiza este tema desde una perspectiva nueva.

La idea del artículo, publicado en la revista Science, es tratar de analizar si algunos caracteres de los hijos como son el éxito escolar, la edad a la que tienen el primer hijo, su altura o peso y datos de su salud están influidos por los genes que tienen los padres, pero que no han sido transmitidos a los hijos. Los investigadores, que en su mayoría son de Islandia, han sacado provecho del programa de seguimiento que se emprendió en este país que tiene una población relativamente homogénea. Han estudiado más de 20.000 individuos nacidos entre 1940 y 1983, analizando su genoma y los de sus padres y madres. Los resultados indican que el éxito escolar está influido por genes de padre y madre y que los caracteres de salud estudiados lo están sobre todo por los de la madre, pero en cambio no tendrían influencia en otros como la altura o el peso corporal.

Estos resultados querrían decir que en el genoma de los padres hay genes que hacen que estos se ocupen de los hijos de manera que tengan más éxito en la escuela o mejor salud. No es posible por ahora saber cuáles son estos genes ni cómo actúan, y hay que recordar también que hay otros factores que son importantes. Sabemos que el nivel social, o el entorno con el que viven los hijos, tienen gran influencia en caracteres como el éxito escolar. El estudio actual permite concluir que padres y madres transmitimos a los hijos los genes que los identifican como individuos, pero que la cultura que creamos en el entorno familiar también influye en la vida de los hijos. Y la cultura es también, en parte, producto de nuestros genes.